La pecera
La pecera es una herramienta de animación que permite regular la palabra durante los debates de grupos grandes. Esta modalidad permite a las personas tomarse el tiempo para pensar en su intervención antes de tomar la palabra y propone un debate con un ritmo más lento que permite así a más personas dar su opinión.
Esta técnica de debate no es la más fácil para las personas que no están acostumbradas a tomar la palabra frente a un grupo. Así que es preferible usarla con un grupo de personas que ya se conocen, o en un grupo del que estamos seguros que el conjunto de participantes va a sentirse cómodo.
Uso práctico
Preparar el aula con dos círculos de sillas : uno pequeño en el medio con un máximo de cinco sillas mirando hacia el centro, y un círculo grande de sillas alrededor del círculo pequeño. Proponer a entre dos y cuatro personas instalarse en el centro, especificando que siempre tiene que quedar una silla vacía en el círculo pequeño en función del número de sillas. Esta animación debe realizarse con al menos diez personas.
Lanzar una primera pregunta al grupo para iniciar una discusión entre ellos/ellas. Las personas sentadas en las sillas del círculo grande les están escuchando. Las personas en el centro no tienen que contestar de una en una, sino que más bien tiene que ser una discusión, un intercambio.
Las personas que quieran tomar parte en la discusión tendrán que levantarse e ir a sentarse en la silla vacía y participar en el intercambio. A cambio, una de las personas sentadas en el centro tendrá que levantarse e ir a sentarse en una silla disponible del círculo exterior. Siempre hay que dejar una silla vacía.
Recordar a las personas del círculo exterior que solo pueden participar cuando están sentadas en el centro. Una vez la discusión terminada, se podrá pedir a las personas que no hayan ido al centro del círculo que compartan sus observaciones si lo desean.
Se puede anunciar a los participantes que la discusión se cumplirá en un tiempo limitado (20 minutos por ejemplo), por lo cual no todas las personas tienen que ir a sentarse en el medio y hablar. También se puede instaurar una regla, que limita el número de intervenciones de las personas sentadas en el círculo del centro a un máximo de dos veces antes de tener que dejar su sitio, y asegurarse de que todos los participantes tengan tiempo para tomar la palabra.
Como animador/a del debate, es importante recordar las reglas al inicio y asegurarse de que los participantes las respeten. También se puede comprobar que las intervenciones de los participantes respondan a las de los demás. En la práctica, después de algunos minutos, el animador ya no tiene que intervenir ya que la palabra circula de manera fluida.
Ejemplo : durante el seminario Formar para Transformar de 2023, hemos utilizado esta modalidad de debate preguntándonos lo siguiente :
- Somos todxs iguales de cara a la participación ?
- Cómo implicamos a las personas más vulnerables en acciones participativas ? ¿Cómo acompañamos como organización ?
