Un buen facilitador: Habilidades y actitudes esenciales para la facilitación
Se considera que las habilidades interpersonales son el punto de éxito de la animación porque es fundamental para construir buenas relaciones con el público, en este caso los grupos de agricultores.
—> Las principales actitudes a adoptar son las de escuchar, ser atento, abierto, democrático y humilde. Esto constituye la postura ideal a adoptar durante las reflexiones colectivas, pero también se adapta a la prevención y gestión de conflictos dentro de los grupos, y más generalmente al mantenimiento de la cohesión social.
DEMÓCRATA : El facilitador debe desarrollar una postura en la que todos los participantes tengan derecho a hablar y a escuchar, que se traduzca en el hecho de saber aceptar ideas diferentes a las propias, no encerrarse en sus convicciones ni aceptar críticas.
PACIENCIA es una actitud indispensable: el proceso de acompañamiento es a largo plazo. Esta actitud es particularmente importante durante la fase de comprensión de las demandas y necesidades de los grupos que se acompañan (atención: si las cosas se precipitan desde el principio, esto puede crear una ruptura con el grupo).
CAPACIDAD DE RESPUESTA Y ADAPTACIÓN para poder elegir el enfoque o el método que mejor se adapte al público y al mensaje que debe transmitir.
TENER CONFIANZA EN ÉL para inspirar confianza en su audiencia.
PERO la confianza debe estar necesariamente asociada a la HUMILDAD : El facilitador no tiene "todas las respuestas", no sabe más que todos los demás; en cierto modo es un facilitador de la investigación.
EN RESUMEN :
La postura del facilitator de UGPM puede ser definido como Maieutics.
Su papel es ayudar a todos los objetivos a dar a luz a sus propias ideas.
El facilitador no debe pensar que lo sabe todo, sino que debe permitir que el público aporte una solución, un análisis, una reflexión personal sobre su propia situación.
